RAYKONG Mochila de cabine Ryanair 40x20x25cm (20L) | Mochila de viagem de avião à prova de água | Bagagem de mão - Azul-marinho

Ning?n problema con dos compa??as a?reas (una de ellas un poco exigente)

Tel que d?crit, bonne qualit?

M?s peque?a de lo que pensaba, entran cosas justas, el port?til tocar?a llevarlo con toda la ropa, el bolsillo peque?o es muy apretado y casi no entra nada. Los bolsillos ocultos son muy peque?os tambi?n y meter un m?vil que no sea iphone es imposible. Para un viaje que sobrepase los tres d?as no la recomiendo. Costuras sueltas, cremalleras rotas que no cierran o que si lo hacen es con dificultad. Despu?s encima es posible que en Rayanair te pongan pegas.\n\nEn fin, recomiendo que compren y prueben otras

Al principio parece un poco peque?a, porque es cortita pero luego cabe mucho, llevo todo lo de 2 personas para 3 d?as (en invierno) incluyendo el neceser. En el bolsillo de fuera tiene muchos compartimentos. A mi me ha gustado mucho la tela y todos los cierres que trae, la recomiendo

La calidad de la tela parece adecuada para el uso moderado que le vamos a dar, al ser equipaje de mano. No tiene pinta de que se vaya a romper f?cilmente.\n\nEl tama?o es muy contenido y, si bien al llenarla es posible que superemos el grosor permitido por las aerol?neas, el hecho de que tenga cinchas de compresi?n hace que podamos ganar unos cent?metros reduci?ndolo considerablemente.\n\nOtro aspecto positivo es su apertura de \"tortuga\", si bien la cremallera no llega totalmente hasta el extremo inferior, dejando unos 10 cm sin poder abrirla, pero es no me parece un problema.\n\nTiene muchos bolsillos, incluso puede que demasiados, para una mochila de este tama?o. Un tama?o que, por cierto, es posible que no sea adecuado para todos los port?tiles, pero eso es algo que viene dado por las dimensiones a las que se ve limitado el fabricante para hacer que esta mochila adecuada para las aerol?neas de bajo coste.\n\nOtro detalle que se agredece es la inclusi?n de una cincha en el pecho, para no tener que preocuparse de que se te muevan las asas.